Cuando Ofelia y Amoke se conocen, sus mundos parecen completamente
contradictorios. Ofelia es el caos, la apasionada por la astronomía que ha
suspendido la Selectividad y que pasa su año sabático en Gales con su padre,
vendiendo mermelada orgánica, cazando liebres con su amigo Harlon y
tratando de encontrar su propósito en la vida.
Amoke es el orden, una solitaria y responsable estudiante de Biología que
pasa todo el tiempo que no está en la universidad cuidando de su hermano
Tayo y leyendo libros de Charles Darwin.
Lo único que Ofelia y Amoke tienen en común son Virginia Wonnacott
(una excéntrica y ermitaña novelista de noventa y dos años), la Asociación
Hiraeth (una peculiar ONG) y la sensación de no tener una vida completa.
Cuando Virginia Wonnacott le ofrece trabajo a Ofelia como su asistente
personal, los mundos de estas dos chicas se juntan. Mediante discusiones,
libros de segunda mano, cartas
y WhatsApps de madrugada,
Ofelia y Amoke se entrelazan
en un viaje para encontrar un
futuro que no sabían que
existía y descubrir los
sentimientos de la una
hacia la otra.