Charlie y Eli Sisters viven en Oregon City y trabajan para el Comodoro, un magnate y quizá aspirante a político que mueve muchos hilos en las sombras y tiene múltiples y variados negocios. Los hermanos, todo hay que decirlo, son sus matones y a veces sus verdugos. Y ahora van rumbo a Sacramento, en California, a cumplir un nuevo trabajo para su jefe, acabar con Hermann Kermit Warm, un buscador de oro. Porque la novela transcurre en 1851, en plena fiebre del oro. No se sabe muy bien en qué río aurífero se encuentra Warm, y el comodoro ha enviado por delante a Morris, el dandy, que también trabaja para él y tiene que averiguar su paradero y seguirlo, para entregárselo a los Sisters.
Y la novela no es sólo la historia del encuentro con el excéntrico, sabio y aventurero Hermann Kermit Warm, a quien no saben por qué deben matar, sino que es también el camino, la cambiante relación entre los dos hermanos y los encuentros y aventuras que en esa deriva por el lejano Oeste se suceden: vagabundos, locos, burdeles, putas y hasta una peculiar contable que fascina a Eli, el menor de los hermanos, un moralista transitoriamente amoral a quien a veces le pesan su oficio y su soledad.
Una novela muy seductora, negra y divertida. Los críticos han comparado a su autor con Cormac McCarthy, pero éste es más bien hijo de Faulkner, mientras que deWitt es sobrino de Mark Twain y primo hermano de los hermanos Coen, si de parentescos literarios se trata.
«DeWitt ha escrito una novela del lejano Oeste que subvierte el género, emocionante, divertidísima e inesperadamente conmovedora» (Publishers Weekly).
«El autor cabalga por un sendero paralelo a la huella de Cormac McCarthy, pero se desvía con frecuencia al territorio de lo cómico para producir una narración salvajemente divertida, estremecedoramente violenta e iluminada a veces por la tristeza» (Ron Charles, The Washington Post).
«Una escritura soberbia, cada capítulo es un cuento en sí mismo, apoyado en la fascinación por los aforismos de Eli... En Los hermanos Sisters, una diabólica combinación de Laurel y Hardy y Butch Cassidy and the Sundace Kid (con un toque de don Quijote y Sancho Panza, para enfatizar la altísima apuesta literaria), deWitt ha creado otra pareja de ficción inolvidable» (Catherine Taylor, The Telegraph).
«Un western con una audaz y hermosa estructura de novela picaresca... La novela es a menudo conmovedora, siempre divertida y, sobre todo, muy original» (New Statesman).
«Estremecedora... algo así como Valor de ley contada por Tom Waits» (Tom Chiarella, Esquire).
«Bienvenidos al salvaje y estrepitoso Oeste de la chispeante, imprevisible fábula de Patrick deWitt. Exquisitamente original, arrebatadoramente divertida, la novela te seduce desde la página uno y quisieras que la última cabalgata hacia el sol poniente no llegara nunca» (Boston Globe).