Vuelve la mayor adicción literaria esperada por más de 15 millones de lectores: la apasionante nueva investigación de Marcus Goldman y el sargento Perry Gahalowood, con el regreso de Harry Quebert «Una voz napoleónica, que no escribe, boxea.»
Laura Fernández, El Cultural «El principito de la literatura negra contemporánea. [...] El niño mimado de la industria literaria, el tipo de buena presencia que estaba llamado a revolucionar el thriller contemporáneo.»
Jesús Merino López, GQ
«Sé lo que has hecho». Este mensaje, encontrado en el bolsillo del pantalón de Alaska Sanders, cuyo cadáver apareció el 3 de abril de 1999 al borde del lago de Mount Pleasant, una pequeña localidad de New Hampshire, es la clave de la nueva y apasionante investigación que, once años después de poner entre rejas a sus presuntos culpables, vuelve a reunir al escritor Marcus Goldman y el sargento Perry Gahalowood. A medida que irán descubriendo quién era realmente Alaska Sanders, resurgirán los fantasmas del pasado, y entre ellos, especialmente, el de Harry Quebert. Una nueva intriga literariamente adictiva, con la inconfundible estructura de varios tiempos, vueltas de tuerca y ritmo trepidante que son el sello de Joël Dicker, «un fenómeno planetario» (Babelia). La crítica ha dicho:
«Joven o viejo, lector exigente o fácil de contentar, mujer u hombre, leerá sin interrupción, hasta la última página, las novelas de Joël Dicker.»
Marc Fumaroli, Le Figaro Littéraire «Sus ingredientes ya [resultan] familiares, pero la virtud de Joël Dicker es convertir en novedoso y apreciable lo que sería manoseado en otras manos.»
El Mundo «La seducción del universo Dicker: [...] una atmósfera de misterio que atrapa a los lectores.»
Lara Gómez Ruiz, La Vanguardia «Rápido y trepidante, te tragas sus páginas casi sin darte cuenta. [...] No se le puede pedir más a un libro.»
Patricia Tena, Llegir en cas d'incendi «Se pueden decir muchas cosas, y se han dicho, sobre Joël Dicker, pero no que no sepa lo que quiere, cómo conseguirlo y a quién se lo debe.»
Juan Carlos Galindo, El País «Un ascensor, un pasillo, la bañera, el metro... mientras en la cocina se calienta el horno. Cuando abres un libro de Joël Dicker, no puedes soltarlo.»
Gema Veiga, Elle «Llega el fenómeno Dicker. El sucesor de Stieg Larsson y E. L. James: entretenimiento en vena.»
Antonio Lozano, La Vanguardia «Dicker [...] no tiene miedo. Está convencido de que es ahora más que nunca cuando necesitamos que nos cuenten buenas historias y él asegura tener una. [...] Cualquiera que se acerque, por poco que sea, a su narrativa detectará enseguida que de fácil no tiene nada; más bien al revés, hay en ella ciertos contrastes y elementos invisibles, que le confieren una capacidad para absorber y evadir al lector similar a la más peligrosa de las drogas.»
Marina Sanmartín, La Voz de Cádiz «Joël convierte en oro todo lo que toca o, mejor dicho, todo lo que escribe.»
Noelia Hontorio, El Español «El arte y la destreza de un contador de historias nato, de alguien que parece haber nacido con el don de envolver a quien le lea con su narración.»
Lorenzo Silva «Oro suizo.»
Susana Picos, Librújula «Unos lo sueñan: él lo ha hecho realidad: [...] cuando lo lees percibes el placer vivo y profundo con el que ha sido escrito, palpita en todas partes, una malicia subliminal que todo lo deslumbra.»
Pierre Vavasseur, Le Parisien «Alguien tenía que decirlo: Joël Dicker da una rabia tremenda. No sólo se ha convertido en el autor de moda [...], sino que además es joven, guapo, inteligente y simpático. Vamos, un tipo al que odias no tanto por lo que es él, sino por lo que no eres tú.»
Álvaro Colomer, El Mundo