Ernesto es un microbio que se introduce en la cabeza del doctor Ploff, un eminente investigador, y le da órdenes absurdas poniendo en peligro su vida: que, vestido de Caperucita Roja, se plante delante de un toro; que cante Duérmete niño en un concierto de música heavy; que vaya a provocar a los hinchas de un equipo de fútbol, que corra el maratón de Nueva York con zapatos de tacón... Por último, Ploff acaba en Marte mientras trata de pintar de rojo a un marciano verde.